Casa Bell es un refugio costero en Baja California, diseñado para disfrutar la vida junto al mar. La vivienda se organiza en torno a patios y se compone de un área principal con espacios comunes y una oficina, dos casitas separadas para mayor privacidad y un garage surf lodge junto al océano.
Inspirada en la arquitectura vernácula de los pueblos mexicanos, la casa promueve un estilo de vida al aire libre, donde moverse entre espacios significa caminar descalzo sobre la arena. Su diseño favorece la ventilación cruzada y la integración con el paisaje. Construida con materiales locales y teja tradicional, se mimetiza con el entorno, manteniendo un perfil bajo y respetuoso.